170gqueso curadoparmesano o alguna variedad de queso fuerte
Elaboración paso a paso
Precalentamos el horno a 200º mientras vamos preparando todo.
Rallamos el queso si fuese necesario, he visto varias recetas con parmesano pero como a mí no me motiva mucho he usado uno curado de oveja y el sabor es bastante suave, he puesto 170 g porque sé que os comeréis un trozo como he hecho yo (muahahah)
Ponemos la leche en un cazo junto con el aceite y la sal y llevamos a ebullición a poder ser sin que se nos salga del cazo y ponga todo perdido (spoiler: esta vez me he salvado porque he usado una olla grande, sino hubiese sido una tragedia)
En un bol, batimos los huevos y echamos poco a poco la leche con el aceite y la sal, removemos para que los huevos no se cuajen con el calor. Añadimos la tapioca y el queso y mezclamos bien hasta que quede una masa homogénea.
La tapioca que he comprado yo venía en gránulos tipo cous cous y me daba miedo que quedase mal, pero le ha dado un puntillo crujiente muy guay, sino os gusta, podéis hacerla más fina con un accesorio para picar azúcar, por ejemplo (yo tenía pensado usar el molinillo de las especias pero al final he decidido dejarlo tal cual)
Hacemos bolitas del tamaño de una pelota de golf y distribuimos en la bandeja del horno, donde habremos puesto papel de cocina o una lámina de silicona y horneamos durante 20 – 25 minutos o hasta que las veáis doraditas. Es normal que suelten algo de grasilla por el queso y el aceite.
Notas
Intentad no comerlas recién salidas del horno, que os puede el ansia viva pero os quemaréis.