Cada día pongo más tarde las entradas! pero juro que no es culpa mía, es que este mes de enero a alguien le ha parecido divertido que trabaje dos fines de semana seguidos y estoy un poco (bastante) cansada, pero aquí seguimos al pie del cañón para que no podáis bajar los excesos navideños. Hoy os traigo una receta francesa que llevaba tiempo queriendo hacer, me compré el molde hace meses y ahí se quedó olvidado entre encargos de galletas, muffins y pastelitos de limón (y porque pensé que Myddna las haría, todo sea dicho) pero el otro día abrí el cajón de la repostería (un día haré un post sobre ese cajón inmenso) y en vez de hacer cake pops, que me dan un poco de respeto, me decidí a hacer las madeleines, que está buenas no, lo siguiente.
La receta es del blog de webos fritos y puedo decir qeu tanto si tenéis el molde (ese como de conchitas que venden en todos lados) como sino, salen muy jugosas; esto último lo digo porque sólo tengo un molde y necesitaba dos y al final puse la masa en un molde de silicona y salió también estupendo. La idea es que queden un poco crujientes por fuera y blanditas por dentro, pero con la silicona la parte de estriada crujiente no queda mucho, la verdad.
Ingredientes:
- 125 g de mantequilla sin sal
- 100 g de azúcar blanco
- 150 g de harina
- 2 huevos
- 2 cucharadas soperas de leche
- 1 cucharadita de postre de levadura química
Preparación:
- Mezclamos los huevos, el azúcar y la mantequilla (recordad que tiene que estar a temperatura ambiente) hasta que la masa quede clarita.
- Añadimos la harina tamizada que habremos mezclado con la levadura y después la leche, mezclamos bien hasta que quede una masa uniforme
- Distribuimos en el molde (yo usé una manga mágica del set de macarons de lekué que es la vida) sin llenar del todo el molde para que no se quede una masa informe
- Metemos al horno las dos bandejas (así ahorráis energía) a 220º durante 5 minutos y 8 minutos más a 180º
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