Confieso que no soy mucho de platos. Normalmente, es Pryrios el que se curra los Grandes Platos De Casa como el Pollo al curry con arroz, los especiales de navidad, y los archiconocidos Tallarines con pollo y champiñones (archiconocidos porque diría que todos nuestros amigos los han comido, al menos, una vez en casa)
Hoy, y con su permiso (creo), os traigo la receta de este plato.
Ingredientes (para dos personas con hambre)
- 180-200 gr de tallarines
- Cuatro o cinco champiñones bien gordos
- Una pechuga grande (dos si son pequeñas)
- Un poco de aceite
- Queso ya rallado, o para rallar (Recomendación del chef: queso semicurado, que queda mu rico gratinado)
Para la salsa tipo bechamel
- 300 ml de leche
- Dos cucharadas soperas de harina (con montañita) tamizadas
- 40 gramos de mantequilla
- Una pizca de nuez moscada
- Una pizca de pimienta
Elaboración de los tallarines con pollo y champiñones
Como la pasta se hace muy rápido, en casa solemos empezar por lo demás.
Lavamos y cortamos los champiñones en láminas, y los ponemos al fuego con una cucharada de aceite para que se hagan. Mientras tanto, limpiamos y cortamos la pechuga de pollo a taquitos.
Una vez que los champiñones estén hechos, subimos el fuego y hacemos la pechuga en él. Cuando los champiñones y el pollo estén hechos, los reservamos.
Por otro lado, en un cazo derretimos la mantequilla y calentamos la leche en el microondas. Cuando la mantequilla esté burbujeante añadimos la harina tamizada (a mí me gusta hacerlo en el momento con un colador pequeño) y cuando esté toda añadida removemos para integrar bien con la mantequilla. Se formará una pasta, que dejaremos que se dore un poquito (muy poco!!) sin dejar de remover en ningún momento.
Poco a poco vamos añadiendo la leche y removemos, de modo que todo se vaya integrando y pasando de consistencia pastosa a cremosa. Una vez tengamos toda la leche incorporada y la salsa sin grumos, añadimos una pizca de pimienta y de nuez moscada, salamos y reservamos tapada para minimizar la «telilla».
Nota: Si has perdido la batalla contra los grumos en la salsa, es honorable usar la batidora. ¡A la próxima saldrá mejor!
Cocemos la pasta en agua con sal según las instrucciones del paquete (preferiblemente «al dente») y cuando esté lista y bien escurrida… ¡Llega el momento del ensamblaje!
Mezclamos la pasta en la olla con los champiñones y el pollo y vertemos sobre una fuente apta para horno. Regamos con la salsa al gusto y colocamos por encima bien de queso rallado. Gratinamos en el horno hasta que el queso esté doradito.
¡A disfrutar!
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