Roscos de Vino

¿Quién ha dicho que los roscos de vino sólo se pueden comer en Navidad?

Mejor consideremos estos roscos unos dulces de invierno, que aún nos quedan días de frío (parece, al menos esta semana) estando a finales de Enero. Podemos hacer lo mismo con los Nevaditos o los Polvorones, yo voto a favor.

Estos roscos salen casi directamente de esta receta de Roscos de vino caseros, con alguna modificación de rigor porque no estaba todo disponible tal cual.

Aviso: Son MUCHOS roscos, siéntete libre de partir la receta por la mitad en sus ingredientes sin problema.

Ingredientes (salieron unos 50 roscos)

  • 580 g harina de trigo
  • 260 g manteca de cerdo a temperatura ambiente
  • 60 g azúcar glas
  • 125 g moscatel
  • 100 g avellanas sin tostar
  • 1 pizca canela molida
  • 1 cdta anís en grano
  • Más azúcar glas para espolvorear los roscos
Rosco de vino solitario
El primer rosco del Ejército de los 50 Roscos

Elaboración de los roscos de vino

Fase 1: Tostado

Calienta el horno a 160º. Coloca la harina en una bandeja y en otra las avellanas. Mételas las dos a la vez y déjalo 10 minutos (mantén las avellanas arriba para controlarlas, a la harina le va a costar más tostarse).

Sacamos las avellanas a un paño con cuidado de no quemarnos y las frotamos para eliminar la mayor parte de las pieles.

Mientras tanto, la harina sigue en el horno (la remeneamos de vez en cuando para que se tueste por igual) y cuando ya empiece a coger un poco de color (¡Sin pasarse tampoco!) sacamos la bandeja y la dejamos enfriar por completo.

Fase 2: La masa

Una vez todo frío, picamos las avellanas en una picadora o en un mortero manual, luego el anís verde y lo añadimos todo a un cuenco grande con la manteca, azúcar, vino, harina tostada y las especias.

Mezclar hasta obtener una masa poco pegajosa y dejar tapado reposando una media hora.

Con ayuda de dos papeles de horno, extendemos con un rodillo la masa hasta que tenga la altura deseada (entre 1cm y 1.5 cm de grosor) y con un cortador (o vaso improvisado) hacemos círculos. Dentro de esos círculos hacemos un agujero secundario con algo más pequeño, como un descorazonador de manzanas o un tape de botella de spray.

Vamos depositando los roscos sobre otro papel de horno (o tapete de hornear). Lo que sobre, lo vamos arrejuntando para extenderlo de nuevo y seguir cortando hasta que el último rosco sea demasiado escaso y triste para seguir.

Fase 3: Horneado y «rebozado»

Calentamos el horno de nuevo a 160º y horneamos los roscos a media altura durante unos 15 minutos (no deberían tostarse demasiado, solo ligeramente dorados). Los sacamos y dejamos enfriar en una rejilla. Repetimos el horneado hasta que no queden roscos.

Bandeja de roscos de vinos recién horneados
Roscos recién horneados

Una vez fríos, los rebozamos en azúcar glas y los colocamos en una lata, con papelillo o sin él.

Duran alrededor de un mes si se almacenan bien cerrados y de hecho mejoran con el tiempo.

Roscos de Vino

Myddna
Hablando de clásicos atemporales de invierno…
Tiempo de preparación 45 minutos
Tiempo de cocción 45 minutos
Reposo 30 minutos
Tiempo total 2 horas
Plato Postre, Tentempié
Cocina Española
Raciones 50 uds

Herramientas

  • Horno con dos bandejas de horno si es posible
  • Un cuenco
  • Picadora o mortero
  • Cortadores de círculo 1 grande, 1 para el círculo interior
  • Lata/bote para almacenarlos
  • Papelillos opcional

Ingredientes
  

  • 580 g harina de trigo
  • 260 g manteca de cerdo a temperatura ambiente
  • 60 g azúcar glas
  • 125 g moscatel
  • 100 g avellanas sin tostar
  • 1 pizca canela molida
  • 1 cdta anís en grano
  • Azúcar glas para espolvorear

Elaboración paso a paso
 

Fase 1: Tostado

  • Calienta el horno a 160º. Coloca la harina en una bandeja y en otra las avellanas. Mételas las dos a la vez y déjalo 10 minutos (mantén las avellanas arriba para controlarlas, a la harina le va a costar más tostarse).
  • Sacamos las avellanas a un paño con cuidado de no quemarnos y las frotamos para eliminar la mayor parte de las pieles.
  • Mientras tanto, la harina sigue en el horno (la remeneamos de vez en cuando para que se tueste por igual) y cuando ya empiece a coger un poco de color (¡Sin pasarse tampoco!) sacamos la bandeja y la dejamos enfriar por completo.

Fase 2: La masa

  • Una vez todo frío, picamos las avellanas en una picadora o en un mortero manual, luego el anís verde y lo añadimos todo a un cuenco grande con la manteca, azúcar, vino, harina tostada y las especias.
  • Mezclar hasta obtener una masa poco pegajosa y dejar tapado reposando una media hora.
  • Con ayuda de dos papeles de horno, extendemos con un rodillo la masa hasta que tenga la altura deseada (entre 1cm y 1.5 cm de grosor) y con un cortador (o vaso improvisado) hacemos círculos. Dentro de esos círculos hacemos un agujero secundario con algo más pequeño, como un descorazonador de manzanas o un tape de botella de spray.
  • Vamos depositando los roscos sobre otro papel de horno (o tapete de hornear). Lo que sobre, lo vamos arrejuntando para extenderlo de nuevo y seguir cortando hasta que el último rosco sea demasiado escaso y triste para seguir.

Fase 3: Horneado y «rebozado»

  • Calentamos el horno de nuevo a 160º y horneamos los roscos a media altura durante unos 15 minutos (no deberían tostarse demasiado, solo ligeramente dorados). Los sacamos y dejamos enfriar en una rejilla. Repetimos el horneado hasta que no queden roscos.
  • Una vez fríos, los rebozamos en azúcar glas y los colocamos en una lata, con papelillo o sin él.

Notas

Duran alrededor de un mes si se almacenan bien cerrados y de hecho mejoran con el tiempo.
Son MUCHOS roscos, siéntete libre de partir la receta por la mitad en sus ingredientes sin problema.
Palabras clave dulce, tradicional
Avatar de Myddna

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Recipe Rating




Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

¿Te gustan nuestras recetas?

Apúntate aquí a la newsletter para no perderte ni una 😎